miércoles, septiembre 13, 2006

Verte o Recordarte

Bueno bueno, todo un récord que hayan pasado solo dos dias y escriba de nuevo, y es por dos razones. Primero porque quedan muy pocos escritos en borrador y quiero acabar con ellos de una buena vez xD, y segundo es porque hoy pasé una tarde tan agradable que solo faltó una personita a mi lado que lo disfrutara conmigo que ni tiene sentido nombrarla porque dudo mucho que entre a este lugar a leerme :( (y dicho sea de paso, por ella dejé de escribir mi acontecer diario aquí porque mejor se lo cuento solo a ella, siendo la única que muestra interés por mis cosas xD) ... bueno, total ... decía que hoy por la tarde me la pasé muy chido.

Por ahí de las 16 horas se vino una lluvia que disfruté como tenía mucho tiempo que no lo hacía (adoro la lluvia porque despierta todos los sentidos, ver el invisible viento en los árboles (y en la basura de la gente cochina ¬¬), escuchar un estrenduoso rayo, oler a tierra mojada, sentir el agua caer (cuando salí a meter la ropa que estaba tendida xD) y sólo faltó el gusto je. Cuando dejó de tronar puse mi más grande descubrimiento musical (que no pienso compartir con nadie :P) y tomé un libro que para mi sorpresa me atrapó, se trata de La rueda de la vida escrito por Elisabeth Kübler-Ross (doh, sin querer les dí una pista de mi descubrimiento musical). Cuando me di cuenta habían pasado dos horas, con una tranquilidad interior muy placentera =')

Y ya, como estoy de muy buen humor fue la segunda excusa suficiente para dejar ya sin tanto rollo otro poema que lleva el mismo título del post, "Verte o Recordarte" escrito por mí el 11 de marzo de 2004 (el cual no refleja para nada mi sentir actual como lo hizo el de hace dos dias).


Ha llegado un momento en el que estar a tu lado
me provoca dolor... un sufrimiento por recordar
que no puedo abrazarte, quererte, besarte, amarte..

Cuando no te veo irónicamente soy más feliz
tu recuerdo me hace soñar, suspirar y querer
vivir para siempre, en estado de suspensión.

Pero llega el momento que los recuerdos no bastan
y entonces te veo y aquel dilema del amor imposible
me hace querer morir para ya no verte más y dejar de sufrir.

Porque morir significa no verte, estar en suspensión
así te recordaría siempre y solo podría gozar
esperando el momento que conmigo has de estar.

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